Presentación

La actividad referente al proyecto arquitectónico, es la base del trabajo que identifica al profesional de la arquitectura; es la actividad que permite integrar, con un enfoque común y una visión global del trabajo arquitectónico, las acciones del conocimiento de otras áreas que participan en este proceso.

El Plan de Estudios de la Licenciatura en Arquitectura considera al Taller de Arquitectura  como el centro de la carrera del arquitecto. Este es un taller integral conformado por el Taller de Proyecto y los componentes teóricos, tecnológicos y constructivos necesarios para el desarrollo de la arquitectura.

Considerando que la universidad es un ámbito de reflexión para la formación de profesionales al servicio de la sociedad, el propósito de los docentes  es promover situaciones de aprendizaje que le permitan al alumno la construcción del conocimiento (darle significado a lo que aprende), creando la consciencia que la arquitectura como construcción social y cultural tiene un compromiso con la ciudad y con la sociedad. 

 

En el proceso de enseñanza-aprendizaje se requiere una participación activa del alumno, el maestro cumple una función mediadora entre los contenidos y el alumno, retomando las ideas de Ausubel, las tareas que le competen al maestro son dar al alumno la ayuda necesaria para construir puentes entre lo que ya sabe y los nuevos contenidos que le permitan la comprensión de los temas, su profundización, y aplicación a su futuro trabajo profesional. La reflexión ha de ser el centro de la formación profesional,  dándole al alumno las herramientas necesarias para hacer frente a la complejidad de las tareas que la arquitectura implica. 

El qué aprende arquitectura lo hace para convertirse en un profesional competente, entendiendo que la competencia implica una capacidad de movilizar diversos recursos cognitivos para ser capaz  de utilizarlos en una situación compleja. Sin omitir que quién aprende es un ser individual con motivaciones y problemas propios que también ameritan ser considerados.

Partiendo de una concepción constructivista del proceso de enseñanza aprendizaje y adoptando un modelo que se centra en cómo aprende el que aprende y que procesos utiliza para aprender se trata de generar situaciones de aprendizaje que promuevan la participación activa de los alumnos, convirtiendo el proceso de aprendizaje en una acción creativa y no en una mera transmisión.